Ida y vuelta con Nicole Becker...

¿Cómo surgieron tus ganas de ser activista?
Mis ganas de ser activista socioambiental surgen de ver un video de millones de jóvenes en Europa movilizándose por la crisis climática. En Argentina nadie hablaba sobre esta crisis o qué impactos tenía. En ese momento me dio bronca y curiosidad a la vez y decidí empezar a estudiar por mi cuenta. Una vez que comencé a entender que la crisis climática era un asunto de derechos humanos y que ponía en riesgo el futuro de mi generación, decidí junto a unos amigos crear un movimiento llamado Jóvenes por el Clima Argentina y convocar a la primera movilización internacional el 15 de marzo de 2019.

¿Qué es lo más alarmante de la situación climática actual?
Para mí, lo más alarmante de la situación actual es que basamos nuestro modelo productivo priorizando el dinero sin importar que esto se pone en peligro el futuro de próximas generaciones violando nuestros derechos humanos básicos como el agua, la vivienda, la salud y sin ir más lejos a la vida.

¿Sentís que las nuevas generaciones tienen otra visión de las cosas y sobre todo otra acción para enfrentar las cosas?
Definitivamente. Creo que entendimos la importancia y urgencia del tema y sobre todo muchos quienes logramos convertir ese miedo y bronca sobre el escenario actual y futuro en acciones concretas como es el caso de Jóvenes por el Clima.

¿En qué consiste Jóvenes por el clima?
Jóvenes por el clima, es un movimiento de jóvenes de entre 15 a 24 años que luchamos para que se tomen las medidas necesarias para frenar los impactos de la crisis climática con una perspectiva de derechos humanos y Latinoamérica.

¿Qué acciones deberían tomar las personas para generar un cambio?
Creo que es importante diferenciar las responsabilidades y entender que el 71% de gases de efectos invernadero son producidos por las mismas 100 empresas. Es decir, nuestras acciones individuales son fundamentales, pero tenemos que exigirles al Estado y sector privado, que tomen las medidas que haya que tomar. En ese sentido, como consumidores y como ciudadanos que emitimos nuestro voto cumplimos un rol fundamental en decidir a qué empresa le compramos o qué postura sobre el tema tiene a quien votamos para que nos represente.

¿Cómo fue estar a la par con Greta Thunberg?
Conocer a Greta y a distintos líderes juveniles fue una experiencia hermosa. Es hermoso que tus propios compañeros de lucha sean tu ejemplo e inspiración.
Con Greta, hablé mucho del movimiento en Argentina, sobre nuestras problemáticas y desafíos, como el tema del fracking.

¿Qué proyectos te deparan para el 2020?
El año 2019 fue un año hito en la lucha socioambiental en donde marcó un antes y un después. Esto quedó totalmente demostrado con el caso de la reforma de la ley 7722 en Mendoza que no se logró gracias a la presión en las calles.
Sin embargo, mis expectativas para este 2020 son aun mayores, lo ambiental tiene que ser política de estado y debemos lograr que cambie nuestra forma de ver el desarrollo del país en donde se incluya la perspectiva ambiental. Para eso, van a ser esenciales las movilizaciones en las calles y poder formar un fuerte movimiento federal.