Entrevista
Entrevista | Personajes

Muchacha Zen

Dejando que todo fluya, logró traer a su vida proyectos que la nutren y una nueva forma de verse. Desde adentro, generó un cambio en todo lo que la rodea.

Conectada con ella misma, logra fluir mejor con el entorno que la rodea. Por razones laborales recorre el mundo, pero se permitió también realizar un viaje a su interior, que derivó en un libro que contagia las ganas de meditar y autoconocerse.

Acabás de publicar tu libro Meditaciones para un viaje interior, ¿a qué público apunta y de qué trata?
El libro es para todas las personas que puedan leer o escuchar. Lo puede hacer desde un niño hasta una persona adulta. Hoy, por ejemplo, mi cuñada me mandó una foto de mi sobrina de ocho años debajo de una carpita leyendo el libro. Son meditaciones simples que duran aproximadamente cinco minutos. Es un pequeño y poderoso libro con treinta y seis meditaciones. Viene con un código QR, que al escanearlo con el celular te lleva directamente a las meditaciones. Son guiadas y sencillas, las puede hacer cualquier persona sin tener experiencia previa en meditación.

¿En qué te ayuda a vos meditar y cuál es el momento del día que elegís para hacerlo?
Me gusta mucho meditar a la mañana y luego por la tarde-noche. La meditación es una herramienta muy útil para conocerse a uno mismo y para conectar con Dios o con lo que cada uno quiera llamar a eso que tenemos todos adentro. Esa fuente de silencio, de paz, de amor, que está en todos los seres y con la que nosotros tenemos la capacidad de conectar. Es una herramienta que todos podemos utilizar para volver a equilibrarnos y para entrar en nuestro centro. Cuando uno está solo con uno mismo y puede lograr entrar en el silencio de la meditación, que propone el silencio del bullicio mental que tenemos normalmente, es cuando realmente descansás. Es un refugio, un espacio donde podés conectar en cualquier momento. Es libre, gratis, está adentro nuestro y al que podemos acudir siempre.

¿Qué cambios empezaste a experimentar en vos al practicarlo?
Me empecé a sentir cada vez mejor. Más lo hacía, mejor me sentía. Más clara en cuanto a mí misma y las cosas que quería. También la meditación me llevó a cambiar la alimentación. Es todo un proceso hacia adentro. Empecé a estar más en paz, a ser una persona más amorosa y conectada no sólo conmigo, sino con todo lo que me rodea. Tuvo repercusiones en toda mi vida, lo que hacemos para nosotros tiene un impacto en todo lo que nos rodea.

La meditación es un refugio, un espacio donde podés conectar en cualquier momento

¿En qué momento llegó la meditación a tu vida?
Me fui hace ocho años a vivir a Inglaterra y ahí conocí a mi maestra espiritual Cher Chevallier.

Con quien realizaste el libro…
Sí, es muy especial para mí que ella, quien dedicó su vida entera a Dios, entregada a este camino, haya colaborado conmigo. Ella me inició en el camino de la meditación en el momento que estaba allá (Inglaterra), que estaba estudiando y tenía tiempo para mí, como no lo había hecho en el pasado.

Ahora estás por realizar un viaje, ¿es para grabar Resto del mundo?
Estoy con Resto del mundo yéndome a Turquía y Tailandia. Estoy viajando bastante por el programa, es un proyecto superlindo, que me gusta y entusiasma no sólo por el hecho de viajar, que lo hago desde muy chica. Sino porque es parte de mi dinámica el conocer otras culturas, religiones, idiosincrasias y personas a lo largo de los viajes. Lo que le sumamos al programa desde que entré son entrevistas a personas que están haciendo cosas positivas por la tierra o por otros seres.

¿Y con qué te fuiste encontrando?
Me estoy encontrando con personas que realmente me inspiran. Conocí, por ejemplo, un proyecto de un señor que recicla basura electrónica, uno de los contaminantes más grandes que tenemos en la tierra. Tiramos todos los electrodomésticos pero, ¿la basura electrónica dónde va? Una persona en Australia se abrió su propio lugar y recolecta todo los desechos de la zona, armó un equipo de gente y lo transforman en otros electrodomésticos y objetos. Podemos vivir y hacer cosas que estén buenas. A mí me inspira y esperamos que inspire a las personas que miren el programa.

Y con tanto tiempo dedicado al programa, ¿cómo venís con tu faceta actoral?
La vida me fue llevando más para el lado del cine, por suerte, porque es un medio que me fascina, donde hay más tiempo y puedo preparar los personajes. De hecho, el 9 de agosto se estrena mi primer película toda en inglés (The last man). Es una producción canadiense-argentina, se estrena en Hollywood un mes después de que se estrene acá.

También estuviste grabando una serie policial, ¿no?
Se llama RRPP, que es una coproducción brasilero-argentina. Es una serie de TV que se filmó entre Córdoba y Brasil. Un policial con actores muy buenos, una linda experiencia. Me encantó incursionar en ese género, de hecho yo había hecho Estocolmo hace poco, así que estaba en ese mundo. Es un año movido, intenso, con proyectos que estoy eligiendo. Es una bendición.

 Lo que hacemos para nosotros tiene un impacto en todo lo que nos rodea

PING PONG:
Un permitido: dormir. Me permito dormir todo lo que pueda.
Una película para ver mil veces: La fuente de la vida.
Un libro: Autobiografía de un yogui.
Una comida: vegetariana. Me gustan las sopas y hamburguesas de lo que sea.
Una virtud: mi buen humor.
Un defecto: tengo muchos, creo que uno es que “no la puedo caretear”. Hay que aprender a equilibrar porque por momentos no nos juega a favor.

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