La visibilidad y la mayor aceptación ponen en el centro de la escena a las familias diversas, que se construyen con una estructura no convencional y que se vinculan con transparencia y solidez. Hay otras realidades familiares, que no entran en el paquete tradicional y se traducen en madres de familias ensambladas, mujeres jefas de hogar, matrimonio igualitario con doble maternidad y mujeres solas que tienen hijos gracias a la ciencia y la inseminación artificial. Si se te ocurre otra forma, ¡también es bienvenida! En esta nota charlamos con madres de familias que no encajan en los estereotipos, pero que son una hermosa realidad.

Family game
Ya confirmamos que madre puede no haber una sola y son muchos los modelos de maternidad. En la actualidad, por fin, algunos derechos fueron conquistados y dieron a luz familias donde el amor es el pilar de base. Los últimos años fueron testigos de un retroceso del modelo tradicional de familia y de la irrupción de otros nuevos. Hoy todos los modelos de madre tienen visibilidad, se habla de ellos y podemos contar lo que nos pasa. Sin olvidarse que sea cual sea la forma en que llegue una mujer a la maternidad, el amor de madre siempre es el mismo. Lo que puede cambiar es el impacto social de su maternidad y la forma en la que viva la crianza de sus hijos. “Si el impacto social fuera negativo, afectará al menor en tanto se den situaciones de desregulación emocional y estrés. Cabe destacar que en nuestro país tenemos una ley de identidad de género, que existe la ley de matrimonio igualitario, que da un marco legal a las nuevas familias y que debemos comprender y aprender, para mitigar las posibles consecuencias negativas”, explica la psicóloga María Belén Guinda.

Cada familia es un mundo
Podemos considerar a la familia como un sistema abierto que tiene múltiples intercambios con otros sistemas y con el contexto amplio en el que se inserta, es decir, que recibe y acusa impactos sociales, políticos, económicos, culturales y religiosos. “Sus funciones específicas son: la reproducción de nuevas generaciones, la socialización de base de los niños y la transmisión de valores, ideales, pensamientos y conceptos de la sociedad a la que pertenece”, explica la psicóloga. En el interior de la familia se definen distintas relaciones simétricas o complementarias, jerárquicas o igualitarias teñidas siempre por valores afectivos, porque el amor siempre tiene que tener su cuota de presentismo. A continuación, tres casos en los que el amor no es un faltante.

Más es más

Hubo un momento en el que Susana Guichal, Valeria Gaete y Hernán Melazzi tuvieron sus quince minutos de fama, ya que fueron el primer caso legal de triple filiación (ya no lo permite el Código Civil). El papá de Antonio (Hernán) es un amigo, al que le propusieron ser donante y accedió pero con la condición de no renunciar a su derechos y obligaciones. “Los nuevos modelos de maternidad y paternidad ya son parte de nuestra realidad. Podríamos pensar que se está dando lugar a estas nuevas configuraciones, que habían sido negadas y ocultadas en otros tiempos, y resulta beneficioso para nuestra sociedad”, explica la psicóloga Guinda. Los tres querían ser padres; un día, Hernán les explicitó que necesitaba ser algo más que “un amigo que viene de visita” y quería los mismos derechos y obligaciones.“No nos cerraba que Antonio venga y diga ´che, ¿y mi papá?´ y antes de ir a un banco de esperma, preferíamos adoptar. Entonces, si había un padre, que existiera, que esté en su vida”, cuenta Valeria.

Las visiones estructuradas de generaciones anteriores venían con fecha de vencimiento y, hoy en día, los niños vienen con otra línea de pensamiento, más avanzado, en temas que conciernen la libertad y los prejuicios. “Siento que las generaciones que están viniendo son otra cosa, no tienen trabas ni complicaciones”, añade Susana, y tiene razón. “A la hora de conversar con nuestros niños debemos ser primeramente honestos con ellos y nosotros mismos. La diferenciación sexual no está establecida en los niños, por eso ellos naturalmente juegan con muñecas y autos, usan diversos colores, y naturalizan estas situaciones”, explica la psicóloga.

“Nuestro caso es el primer caso legal, pero existen todos los formatos habidos y por haber, que no son como ese tradicional por el cual quedan un montón de chicos fuera de ese librito de ´mamá y papá´”.

La suma de las partes
Georgina vive en Mar del Plata con su marido y sus hijas de dos y cinco años. En Quilmes, Buenos Aires, vive Bárbara (la expareja de su marido), con sus tres hijos y su actual marido. El engranaje es Lourdes, de quince años, la hija de su pareja Fernando con Bárbara. “La relación siempre fue impecable y hubo armonía y respeto por todos. Desde que la conocí a ella, pegamos buena onda y lo fundamental para Bárbara era que su hija esté bien conmigo, contenida y así fue”, relata Georgina mientras remarca que para ese entonces Lourdes tenía solo tres años.
Como familia ensamblada que son, funcionan diez puntos, nunca hubo un roce y hasta comparten cumpleaños y navidades todos juntos. “Ceder, de eso se trata la vida. La verdad que funcionamos muy bien. Ahora fue la fiesta de 15 de Lourdes, la hija que comparten, y fueron mis papás que para ella son abuelos, mi hermana, todos. Compartimos la mesa principal y en el momento de cortar la torta estábamos los cuatro”.
 “Los valores que coincidimos son el respeto y el estar unidos. Que los nenes estén bien, que no sientan la separación de los padres, estar en armonía y en paz”, Georgina Cesarotto
Persevera y triunfarás
El proceso previo a que Julián tenga el apellido de sus dos madres, Cardozo y Lucero, fue bastante engorroso. En cuanto a lo administrativo hubo muchas dificultades, a eso se le añaden las situaciones vividas, ¡puf! Laura explica: “En cuanto a lo escolar, la madre no gestante no podía retirar al menor sin la autorización previa como cualquier familiar; lo mismo con los cuidados médicos, ya que para realizar cualquier práctica se necesitaba la autorización de la madre gestante”. Ahora el beneficio de poder haber sido anotado con ambos apellidos permite hasta elegir anotarlo en cualquiera de las dos obras sociales, agregando que la madre no gestante puede llevarlo al médico y tomar cualquier tipo de decisión. Cosas básicas para una familia tradicional, pero que a ellas les costó mucho y al fin se les dio. ¡Enhorabuena!
Laura recuerda que, cuando Julián cursaba sala de 3 años y les consultaron a ellas su apellido, al escuchar la presentación de las madres, él manifestó con su escasa edad que su nombre era "Fuli Cadozo Lucedo". Por lo que al momento de la entrega de su nuevo DNI lo vivió como algo normal, natural y emocionado de tener ambos apellidos. Simples actos que mejoran la calidad de vida de las familias. Por suerte nunca sufrieron discriminación por ser dos madres, pero no se niega cierta incomodidad en instituciones como la escuela donde aún se rigen con la “línea hetero” normativa. Por suerte, todo se va volviendo más flexible en esos aspectos: “Nos parece injusto tener que estar tachando cosas en algo tan importante como es la educación de nuestro hijo. Redactamos un formulario mas inclusivo, no solo para nuestro hijo sino para aquellos que tiene dos papás, o una abuela, o tíos, opciones que nos incluyan a todos y no que nos segreguen”, expresa Laura. Con respecto al rol de madre, es el mismo para las dos. Se dividen las tareas y el tiempo ya que ambas trabajan. Y es así como con defectos y virtudes, todas tenemos la misma tarea: hacer los mejores malabares en la crianza con tal de lograr la felicidad de sus hijos. ¡Feliz día!, los 365 días del año.

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Madraza
Ya pasó un año desde que, bajo el método de inseminación artificial, se convirtió en madre, soltera y sin apuros, de Toribio. ¡Ídola!

ESPECIALISTA CONSULTADA
María Belén Guinda
(MP47.118)
CIMAS Consultorios Interdisciplinarios de Atención en Salud
Especialista en niños y adolescentes.
Tel.: (0223) 155896779
mariabelenguinda@yahoo.com.ar