Esta receta (inspirada en mi amiga Ornella) es especial para los fanáticos de los fideos que, como ella, pueden comer pasta seca todos los días de la semana. También resulta ideal para los más chicos, que suelen amar los fideos en todas sus versiones y formas. Esta forma de croqueta nos brinda una manera “transportable” de saborearlos. Son ideales para el verano e incluso para llevar a la playa ya que a temperatura ambiente son muy ricas también. Podés hacer esta receta de cero o aprovechar los fideos de otra comida que te hayan quedado en la heladera.

Ingredientes
25 g de manteca
2 cdas. de harina 0000
250 cc de leche fría
250 g de pasta seca corta (yo usé coditos)
100 g de queso crema sabor cheddar (yo usé el que empieza con F)
100 g de muzzarella
2 huevos
200 g de pan rallado
Sal y pimienta negra
C/n de aceite para freír

Preparación:
Hervir los fideos en abundante agua con sal hasta que estén al dente. Colar y refrescar con agua fría para cortar la cocción. Reservar. En una olla de fondo grueso, derretir la manteca. Agregar la harina y revolver hasta que tome un color beige claro. Agregar de a poco la leche fría sin dejar de revolver con batidor de alambre. Cocinar hasta que espese. Retirar del fuego. Agregar el queso crema sabor cheddar y la muzzarella rallada (para rallarla fácilmente, congela el trozo de queso y hacelo cuando esté hecho “piedra”). Sumar la pimienta, probar y, solo si es necesario, agregar más sal. Agregar los fideos e integrar bien.
Llevar a una fuente cubierta con papel film a la heladera durante al menos cuatro horas. Transcurrido ese tiempo, mojarse las manos con agua, tomar porciones de pasta y formar las croquetas. El tamaño queda a tu elección; a mí me gustan medianas para que haya bastante contraste entre lo crocante de afuera y lo cremoso de adentro. Pasar cada croqueta por harina, luego por huevo batido y finalmente por pan rallado, presionando bien. Llevar al frío por lo menos 30’. Freír en abundante aceite hasta que estén doradas. También podés hacerlas al horno ¡pero fritas siempre son más ricas!
Acompañar con una salsa rápida de puré de tomate, ajo rallado y oliva... ¡O con kétchup!

Esta es la receta base. Como siempre te digo, ¡usa tu imaginación! Te propongo algunas ideas: panceta dorada, tomates secos, hierbas picadas, cualquier trocito de verdura que tengas, otras variedades de queso, pesto, frutos secos, jamón, pedacitos de pollo, etc.