Una charla con Chiara Parravicini, la artista que es la cara de la última campaña de Furzai, marca de diseño clásico y minimalista con detalles modernos que propone, en su última colección, un homenaje a la voz individual en la fuerza colectiva.  

Hace poquito lanzaste “Lloro”, tu primera canción en español, ¿cómo fue volcarte a crear algo que te resistías tanto?

Ay fue, te juro, muy transformador y me enamoré. Ahora me fascina cantar en español, es algo que nunca pensé que me iba a suceder. Estaba tan negada en que me iba a costar encontrar una manera de cantar en español que me sienta identificada, que se escuche bien y que no se qué… y con “Lloro” fue tremendo porque dije “bueno, lo voy a hacer” y me volqué a hacerlo y a escribirla en español, porque ya estaba escrita la letra en inglés y empecé a escribir de cero porque, obviamente, no se pueden traducir directamente las cosas. Y como que ahora me fascina cantar en mi idioma, así que estoy recontenta. Es como un nuevo comienzo, yo ya había lanzado Wilder, pero esto lo siento como si hubiese empezado de cero.

¿Y qué fue lo que te motivó a hacerlo?

Algo mío interno primero, porque era algo que me pesaba no tener la costumbre de cantar en mi idioma. Sí es verdad que hablo los dos idiomas naturalmente, son mis lenguas madres, pero como que no entendía porqué no me salía cantar en español tan naturalmente como en inglés. Y después eso superarlo y lograr cantar en español de una manera que me guste fue un logro enorme para mí. Y también conectar con mi público de Argentina, en Argentina la gente no escucha mucho artista que es argentino y canta en inglés y, a parte, la verdad es que fue una evolución personal y ahora realmente lo agradezco porque es hermoso.

¿Qué sentís que te devolvió el público?

Y es como que les di lo que esperaban hace tanto tiempo. Todo el mundo me decía “cantá en español”, y yo estaba negada. Y finalmente terminó sucediendo y fue aliviador. 

Leía que cuando grabaste “Lloro” la voz que quedó era una refe, pues pandemia (risas)… ¿Cómo trabajás tus propias autoexigencias?

Me parece que nos lleva a lugares superiores (risas) es algo que pesa un poco pero todo tiene su lado bueno y malo. Somos un Ying y un Yang, ser así las mujeres también nos lleva a lugares extraordinarios y podemos hacer muchísimas cosas. Tenemos una capacidad enorme. Pero bueno, con “Lloro” fue un ejercicio sí, porque era una voz de refe y, la verdad, que el año pasado fue cuarentena, medio apocalíptica y no había mucha posibilidad de regrabar el tema cuando queríamos lanzarlo, entonces, era eso o nada, esperar a que se abra todo de nuevo. Y yo quería sacar música, así que dije “bueno, no es exactamente lo que yo quería, pero está bien y es humana así que vamos”. 

Digamos que fue algo sanador “Lloro”…

Sí, completamente… de hecho, fue un año de mucho trabajo emocional y espiritual. 

¿Cómo vivís el hecho de ser una artista independiente?

La verdad es que todo tiene su lado bueno y su lado malo. Ser independiente, a veces, es difícil porque vos tenés que ser el motor de todo y pensar desde el detalle más pequeñito hasta lo más grande. A veces, me dan ganas de dedicarme a hacer música y punto, no de hacer todo lo demás que es un montón. La gente por ahí no lo ve, pero es todo un mundo para los artistas lo que tenemos que hacer y autobancarnos nuestro proyectos, además. Pero por otro lado uno puede hacer lo que se le cante, nadie te dice qué hacer, tenés tus tiempos, nadie te apura y podés manejar tu vida como vos quieras. Me aparece que tiene un lado positivo espectacular y también como empoderado. Poder hacer lo que uno quiera, motorizado por uno mismo, es increíble.

Sos embajadora de Chanel Beauty, ¿cómo vivís hoy vos la belleza femenina?

La verdad, como con mucho autocuidado. También al haber tenido mucho tiempo en casa el año pasado, me reconecté con mi cuerpo, con mi salud… hacer ejercicio, comer bien, dormir buenas horas… siempre fui una persona que le dio mucha bola a la salud, pero este año que pasó fue como la última evolución. Todo el tiempo estoy en un camino de investigación a ver qué me hace bien, qué me hace mal. Y creo que eso es el puntapié inicial para todo el mundo estético de la belleza y el maquillaje que me fascina pero que entiendo, también, que viene por dentro. Pero la verdad que tener la herramienta del maquillaje un día que por ahí no te sentís tan bien es mágico. 

También sos parte de la nueva campaña de Furzai, y ellos están haciendo un homenaje a la voz individual en la fuerza colectiva… ¿cómo vivís todos estos movimientos que se generan en torno a las mujeres, la diversidad, la ruptura de estereotipos…?

Es una satisfacción enorme que haya tanto poder femenino resurgiendo, tomando el lugar que debemos tener en la sociedad. Me parece un momento muy inspirador y, creo que, después de tantos años de lucha feminista me parece que esto, por fin, viene para quedarse. Hubo varios períodos de lucha feminista, que llevaron a que hoy estemos en donde estamos, y puede hacer que la lucha sea definitiva, ¿no? Pero ahora siento que es como que ya llego a un límite el patriarcado, ya no va más, ya no hay vuelta atrás. Ahora cada vez va a haber más mujeres que tengan el lugar que se merecen.

Se nota que sos bastante fundamentalista con tus valores en tu accionar y en tu música, ¿cuáles son tus valores principales?

Me gusta transmitir la fragilidad un poco, no me gusta dar una imagen de que la tengo clarísima, porque no es real, en mis canciones siempre hablo de la búsqueda… son medio existenciales mis temas (risas). Supongo que irá virando en función de lo que suceda en mi vida pero, ahora, están en un lugar muy como de despojar esa careta de seguridad y fortaleza falsa. En realidad para lograr eso tenés que tener muchos años de trabajo espiritual encima, ¿no?

“Me gusta transmitir la fragilidad un poco, no me gusta dar una imagen de que la tengo clarísima, porque no es real, en mis canciones siempre hablo de la búsqueda… son medio existenciales mis temas”, Chiara Parravicini

Volviendo un poco a la moda, en esto de que nos une Furzai, ¿cómo definirías tu estilo a la hora de vestirte?

Creo que es bastante versátil, como que depende mucho de cómo me siento en el momento. No tengo un estilo fijo. De repente puedo estar vestida tipo bohemia setentosa y otro día con un look de yoguineta deportiva, porque quiero estar cómoda y canchera. Varía un montón y tiene que ver un poco con mi personalidad geminiana, bastante cambiante (risas). 

Y pasa también con tu música, ¿no?

Me jode bastante eso de querer etiquetar a la gente. La verdad que ni idea (risas), escuchá la música y decidilo vos. Tengo muchas aristas… soy muchos estilos en uno, especialmente por toda la música distinta que escuché, pasé de escuchar rock y folk de los 80 y después empecé a escuchar más R&B, artistas modernos, y ahora escucho de todo.

Sabemos que la industria de la moda contamina y se está tomando cada vez más consciencia al respecto, ¿cómo es tu relación con la moda en este aspecto?

Me fascina todo este movimiento, todo esto llegó a un límite. Ahora hay una consciencia enorme y viene como escalando cada día más, la gente entiende cada vez más el impacto que genera con todo su consumo. Me parece genial que se creen textiles orgánicos, me parece que hay más aprecio por las cosas nobles, y ojalá que sea cada vez más. Empezar a cambiar la cabeza de que no hay que comprarse el último ítem de moda, por ejemplo, yo nunca fui así porque no me interesa estar a la moda. Me gusta tener un poco de estilo propio. No me da satisfacción, de hecho me parece completamente insatisfactorio ir a una tienda barata y comprar cuarenta mil cosas baratas, prefiero comprarme algo de calidad, de valor y que me perdure en el tiempo.

Además todo vuelve…

Sí, totalmente amo los lugares vintage, encontrás cosas espectaculares y que, encima, tienen una historia.

¿Y qué podemos esperar de vos en los próximos tiempos?

Estoy haciendo un montón de música nueva, preparando nuevos temas, me tiene recontenta eso. Estoy haciendo una música que me encanta y estoy muy agradecida con poder hacerlo y con toda la gente que colabora conmigo y hace que mi música sea muchísimo mejor. Colaborar con gente me encanta, tenía un método de composición supersolitario y ahora estoy vibrando con una energía mucho más colaborativa y me encanta y saca lo mejor de mí. Y mucho trabajo espiritual también. 

¿De que forma trabajás tu espíritu?

Tratando de conectar con lo que me sucede a mí, estando sola, escribiendo, poniendo las emociones en canciones, leyendo… Me parece que el primer paso es estar conectado con uno mismo. Viendo qué consumo, por ejemplo, la alimentación tiene mucho que ver. Si comés chatarra todo el día, difícilmente puedas conectarte con lo que te sucede a nivel emocional. Siempre dándole mucha atención a eso, teniendo conversaciones con mujeres que me inspiran y teniendo gente que me rodea que aprecio y siento que me aportan. Para mí eso es trabajar en mi espíritu. 

PING PONG

Una prenda básica: unos buenos jeans. 

Alguien con quien te coparía hacer una colaboración musical: con Peter Gabriel (risas).

Una mujer que te inspire: Joni Mitchell.

Algo que te saque de quicio: los malos modos. 

 Algo que anheles cumplir: llegar a mucha gente con mi música y poder vivir de esto el resto de mi vida.